Holografías ultrasónicas compactas para ensamblar materia en 3D en un solo paso
La creación de formas tridimensionales a partir de elementos básicos o incluso células es un importante tema de investigación, con numerosas aplicaciones potenciales en los campos de la medicina y la investigación general. Aunque pueden utilizarse moldes y andamiajes físicos, el uso de holografías ultrasónicas es preferible en muchos aspectos. Utilizando ondas sonoras ultrasónicas en un líquido procedentes de dos o más transductores conformados para interactuar de una manera predeterminada, cualquier partícula suspendida en este líquido será empujada y permanecerá en un lugar específico. Investigaciones recientes de [Kai Melde] y sus colegas han producido algunos resultados fascinantes aquí, logrando formas 3D reconocibles en un medio líquido.
Estos son algunos de los resultados más concretos obtenidos tras años de investigación. Lo que distingue a la holografía ultrasónica de la xolografía basada en la luz es que esta última utiliza la interferencia de fotones entre dos fuentes de luz para imprimir rápidamente en 3D un objeto dentro del medio de impresión, mientras que la holografía ultrasónica actúa más como un molde basado en la presión ultrasónica. En este caso, la xolografía también está más limitada en sus aplicaciones, mientras que la holografía ultrasónica puede utilizarse, por ejemplo, con la ingeniería de tejidos biológicos, debido a la suave presión ejercida sobre la materia en suspensión.
Para las investigaciones médicas en curso, como el cultivo de órganos (por ejemplo, con fines de trasplante), se requieren andamios, que podrían ensamblarse mediante una técnica de este tipo, así como la manipulación y el ensamblaje de tejidos biológicos directamente.